Thais Villas quiso saber cómo se independizan los jóvenes españoles y, para ello, se desplazó hasta un barrio ricoy uno obrero. Una joven de un barrio rico explicó a la reportera que se fue de casa de sus padres a los 18 años, cuando se fue a estudiar fuera, a los 21 ya era totalmente independiente y a los 26 ya se pudo hipotecar con su piso. "Yo sé que es un privilegio, soy privilegiada", afirmó la joven,
Una realidad que contrata con la cuentan en el barrio obrero. "Con 25 años tener que estar dependiendo de ellos es una mierda", lamentó una joven de barrio obrero, que destacó que no solo necesita pagar el piso sino más gastos por lo que a veces pide ayuda a sus padres. porque no solo es el piso son mas gastos. "Es muy complicado mantenerte sola porque mi trabajo es muy precario", explicó la joven, que detalló que ahora comparte piso "en 50 metros cuadrados" pagando "260 euros por la habitación con una cama de 90 y sin casi mas huecos".
Una situación parecida a la de un joven de un barrio obrero, que explica por qué no se ha independizado todavía de sus padres: "Entre que es difícil conseguir trabajo fijo y los alquileres están cada vez mas altos, económicamente es imposible". Por eso, la mayoría de los jóvenes del barrio obrero sigue recibiendo algún tipo de ayuda económica de sus padres. Una mujer afirma que su madre le echa una mano con la factura del móvil y algún gasto extraordinario, pero ningún capricho: "Llevo sin ver el mar desde antes de la pandemia".
Barrio rico y barrio obrero
Un hombre de un barrio rico reconoce que su perra Lola 'tiene un armario más importante" que el suyo
Thais Villas explora las diferencias entre un barrio rico y un barrio obrero en relación con el cuidado de sus perros. En esta ocasión, indaga en cuánto dinero gastan los vecinos en ropa para sus mascotas, con sorprendentes resultados.