Una vez finalizada la segunda jornada de 'El Jefe Infiltrado', Patricia Moreno se sienta a charlar con Nico, uno de los repartidores de 'Skalop', para descubrir cómo está su situación personal y la de su familia.
El trabajador confiesa que hace años tuvo una pelea en una discoteca y en 2009 le condenaron a dos años de prisión. Como no tenía antecedentes le pusieron una multa, pero al no poder pagarla, estuvo en la cárcel durante seis meses.
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Entonces, asegura, la empresa le brindó mucha ayuda y le ayudó a conseguir la libertad condicional enviando ofertas de trabajo. Además, una vez salió de prisión le volvieron a contratar para que se reincorporara al mundo laboral.
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El jefe infiltrado presencia cómo una camarera intenta cobrar de más a unos clientes mediante tarifas inventadas
Dado Lima, el jefe de Toro Burger, no daba crédito a lo que sus oídos escuchaban. "Coste extra de 3 euros", decía su camarera a unos clientes. Algo, que no era cierto y él sabía... Sin embargo, tenía que callar para no delatarse.