El negocio inmobiliario es, sin duda, uno de los más boyantes del Camino. Los precios de las propiedades se han disparado entre un 20% y un 30% en los últimos dos años, lo que hace que sea una inversión rentable. Basta con echar un vistazo a los portales inmobiliarios, en los que podemos encontrar un albergue en Burgos por 3,5 millones de euros, pisos en pequeños pueblos que se venden a precios de capital de provincia, y edificios abandonados que se ofrecen como una oportunidad.

En la zona más transitada del Camino, se acaba de vender un pazo de 8.750 metros cuadrados. Una agente inmobiliaria que lleva 20 años trabajando en la zona ha comprobado que cada vez entra más capital extranjero a la hostelería. "Un pazo como este puede rondar entre los 350.000 y los 550.000 euros", señala la agente, a lo que añade que "el 80%" de sus "inversores son extranjeros".