El precio de las camisetas de fútbol sigue aumentando con el paso de los años, un dinero que tras su venta se tiene que repartir entre los diferentes actores que participan en el proceso, como explica Pedro Bravo, presidente de la Asociación Española de Agentes de Futbolistas.

"El fabricante se puede llevar unos 17 euros, el vendedor se lleva más o menos 25, hay que considerar que hay un 21% de impuestos, que es lo que se incluye en cada una de las camisetas que se venden. El distribuidor más o menos un 5, cinco y pico. El club se llevaría cinco y medio o seis...depende. Y la marca, pues 25, 26", explica el agente en base a una camiseta de 150 euros, que recalca que esta división es sin contar una posible comisión del jugador del que se vende la camiseta.