Antonio Anglés ya tenía un pasado delictivo antes del crimen de Alcàsser, especialmente con una condena que le cayó en 1991 por la detención ilegal de Nuria Pera, como se explica en este programa de Equipo de Investigación en 2018.

"Nuria conocía el comportamiento de Anglés porque había sufrido agresiones brutales por parte de Anglés. En una ocasión la dejó encadenada en una habitación con un doberman vigilante, sangrando. La narración de los hechos eran escalofriantes. Fíjate si había miedo, que se la llevó a casa de su madre porque allí nadie le iba a delatar. Todo el mundo allí le tenía miedo", explica el abogado José Domingo Monforte sobre el caso.

Unos hechos que le costaron una condena: "Seis años y cuatro meses, la máxima pena que podía caerle".

Ahora, el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Catarroja ha denegado a la familia de Antonio Anglésdeclarar como muerto al autor material del crimen de Alcàsser. Así que para la Justicia, Anglés no está muerto. Pese a que se piensa que murió cuando huyó de España como polizón, rumbo a Irlanda. Sin embargo, nunca se ha probado que fuese así, y él sigue en busca y captura hasta que prescriban los hechos, el 14 de diciembre de 2029.

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación de 2018