Localizamos a Sebastià Comas, el carcelero de Mari Àngels Feliu. El hombre sigue trabajando como camarero. Siempre ha asegurado que la liberó en contra del resto de secuestradores. Comas afirma a Equipo de Investigación que fue "engañado", creyendo que iba "a buscar un paquete". "Resulta que por la noche me llaman y me dicen que el paquete se convirtió en pajarito, y eso ya me dio mala espina", recuerda.
Según cuenta, le ofrecieron "seis millones en cuatro días". "Los primeros 140 días yo estuve a tres o cuatro metros de ella. Ella estaba en el zulo y yo estaba a una distancia con mi colchón y mi tele. Las condiciones eran colchón y su radio puesta para molestarla y no dejarla dormir, aunque ella se adaptó a aquel entorno", indica el hombre, quien asegura que no la pudo liberar antes.
En el barrio de Usera
Una inmobiliaria china con nueve minipisos ilegales da un portazo a Equipo de Investigación
Uno de los vecinos de la zona confirmó a los periodistas que la Policía llegó incluso a visitar un local en el que no hay nada que indique que se dedica al alquiler o a la compra y venta de vivienda.