Las limitaciones legales que algunas ciudades españolas están imponiendo a las despedidas de soltero ha hecho a las empresas organizadoras buscar otras ubicaciones, siendo fincas apartadas del mundo los lugares escogidos.

Equipo de Investigación presencia como un grupo se marcha a una finca apartada en la zona de Toledo, donde tienen una jornada organizada: "Hemos pagado 75 euros y lo que nos incluye es esto de humor amarillo, luego una barbacoa con bebida ilimitada y luego un Skape Room también".

Y, ante la pregunta de por qué esta ubicación, tienen clara la respuesta: "Al final aquí puedes gritar, puedes saltar, puedes destrozar, da igual que no molestas a nadie, es mucho más cómodo. Ni peligro de multa, ni molestar, ni nada de nada".