Drogada, maltratada y violada, así es como Patricia Aguilar aguantó los abusos de Félix Steven Manrique durante más de un año y medio. Manrique la captó a través de Internet cuando apenas tenía 16 años y le convenció para que viajase a Perú con él.

Patricia huyó de casa con 18 años recién cumplidos, pero la joven alicantina no fue la única. Manrique captó a varias mujeres y las sumergió en una secta en la que él se autoproclamaba como el príncipe Gurdjieff, un líder que salvaría a sus elegidas del apocalipsis y repoblaría el mundo con ellas.

"Nosotros debíamos prepararnos para que justamente esta nueva raza repoblase el mundo", explica una víctima del gurú.

Una de las víctimas de Félix Steven Manrique

Durante su tiempo en la secta, las mantuvo mal alimentadas y drogadas. Les obligaba a seguir unas normas que incluían prácticas de meditación, alabanzas a su figura y ritos de iniciación.

El pasado 4 de julio, la Policía peruana encontró con la ayuda de la familia de Patricia Aguilar el lugar en el que Manrique tenía escondidas a 3 mujeres y 5 niños. Entre ellas, estaba la joven alicantina y el bebé que tuvo con él.

Manrique ya está detenido por delitos de trata de seres humanos, aunque él se defiende diciendo que "a la gente por trata, que es un delito reciente inventado en el año 2010, cómo es posible que les traten peor que a delincuentes que han asaltado el banco de la nación".

Patricia ya ha vuelto a casa con su familia y después de recibir atención psicológica, recuerda con horror todo lo sucedido. Expediente Marlasca la ha entrevistado en exclusiva.