Pitingo asegura que ha ido "a contracorriente" desde que nació. "No he estado conforme nunca con nada, ni he pensado igual que la gente, ni pienso pensar igual que la gente" señala, y añade: "Yo voy a lo mío y puede ser que tenga o no razón pero, ¿por qué voy a cambiar mi forma de pensar?".

Sin embargo, el cantaor manifiesta que "estamos en un momento en el que es peligroso hablar de política" y confiesa que ha llegado a recibir amenazas con su hijo por ello, algo que le hizo tomar la decisión de ponerle dos meses de escolta.

"Podía haber denunciado a mucha gente", indica, y cuenta que le han llegado a llamar "gitano nazi". "¿Se puede decir absurdez más grande?", espeta, y declara que nunca ha tenido pelos en la lengua, ante lo que Juan del Val comenta que "al final, compensa el no estar permanentemente en el redil".