"No somos clientes de las redes, somos su producto, el producto somos nosotros". Es la reflexión que lanza Gonzo tras sumergirse en la 'cara B' de las plataformas para elaborar el especial de Salvados 'Redes sociales: la fábrica del terror'. Antes de su estreno, el periodista denuncia en La Roca la mentalidad de estas compañías y cómo se mueven por los beneficios.
"Si los que cometen un delito automáticamente su perfil fuese borrado, las redes sociales perderían un porcentaje de su clientela bastante importante, esa es la forma de pensar", resume Gonzo: "¿Perdemos a estos clientes o seguimos ganando dinero con ellos? No, ganemos dinero con ellos porque lo que muestran hace que a millones de personas alrededor del globo les atraiga", ilustra.
"Igual que yo la primera vez que le hice una foto a un pulpo y la puse fue porque vi a mucha gente antes haciendo fotos a la comida y colgándola", expone Gonzo, habrá alguien con "la violencia mucho más asimilada", que "igual que ve cinco o seis vídeos un día en el que alguien mata a alguien o pega alguien" y "llegará un día que le parecerá bien salir con un sable detrás de su hija" y grabarlo.
Un caso, este último, que relata una de las moderadoras de contenido entrevistadas en Salvados. Un vídeo que además fue censurado por Meta "por el pezón que se le ve a la madre, no porque vaya detrás de su hija con un sable", avanza Gonzo. "Es tremendo", sentencia.
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