Comenzaban a alzar su voz
8 de marzo de 1975, la primera jornada mundial por los derechos de las mujeres y la respuesta del franquismo en España
Entre líneas Mientras el mundo se unía en defensa de los derechos femeninos, el régimen de Franco usó el 'Día Internacional de la Mujer' como un intento de ocultar la represión que aún sufrían las mujeres bajo su control.

Hace 50 años, en 1975, la ONU proclamaba el primer 'Día Internacional de la Mujer', un hito que movilizó a miles de mujeres en todo el mundo en defensa de sus derechos. Sin embargo, en España, bajo el régimen de Franco, el 8 de marzo no fue una jornada de protestas, sino un intento controlado de las autoridades franquistas por disimular la represión que aún sufrían las mujeres.
En un contexto donde el franquismo vivía sus últimos años de dictadura, la conmemoración del 'Día Internacional de la Mujer' fue puesta en manos de la Sección Femenina de la Falange, una organización que consideraba a la mujer como "complemento del hombre". Este intento de "lavado de cara" del régimen solo reflejaba la continua opresión que vivían las mujeres españolas: el permiso marital seguía en vigor, y las mujeres necesitaban la autorización de sus maridos para cualquier acción legal o administrativa. En la práctica, "la mujer tenía que obedecer al hombre", y no podían ni denunciar abusos sin la presencia de su cónyuge.
Mientras tanto, en las calles españolas, el debate sobre la necesidad de derogar la ley patriarcal que les mantenía bajo el dominio masculino empezaba a ganar fuerza, aunque aún no era visible en las manifestaciones públicas. A pesar de que la represión seguía vigente, como lo demostraba la persecución de mujeres por adulterio o el hecho de que los anticonceptivos y el aborto seguían siendo ilegales, algunas voces comenzaron a alzar su protesta.
Este primer 8 de marzo, lejos de ser un acto de resistencia en España, se transformó en una expresión simbólica de la lucha que se libraba en la clandestinidad, impulsada por mujeres que seguían desafiando las leyes injustas. La caída de Franco en noviembre de 1975 y la transición a la democracia, solo un año después, fueron clave para que, en 1978, España celebrara por primera vez el 'Día Internacional de la Mujer' con el respaldo oficial del nuevo gobierno democrático.