La ofensiva de Netanyahu no solo no se detiene, sino que se expande. ¿Qué impulsa al primer ministro israelí a mantener activo el conflicto? El conflicto con un enemigo externo refuerza su posición interna. Sin embargo, hay un nivel más personal que también influye en sus decisiones.

En laSexta Columna cuentan una historia que marcó su vida y también a todo Israel: la historia de su hermano mayor, Yoni Netanyahu, quien se convirtió en héroe nacional en 1976 ¿Qué ocurrió entonces? Un comando terrorista secuestró un avión con un centenar de israelíes y los llevó a Uganda, donde los retuvo en el aeropuerto de Entebbe. Un grupo de fuerzas de élite de Israel logró liberar a todos los rehenes, pero sufrió una única baja: la del jefe del operativo, Yoni Netanyahu.

La vida política de Netanyahu está plagada de momentos que reflejan cómo ese trauma familiar ha influido en su figura.

Otro personaje trascendental en su familia es su padre, un prestigioso historiador experto en la Inquisición y en la persecución de los judíos en España. Su padre, hispanohablante y miembro del sionismo revisionista (la corriente de la derecha sionista), sostenía que la tierra prometida no se negocia geográficamente y que el pueblo judío debe salir adelante mediante el uso de la fuerza y la autodefensa.

Además de ser historiador, su padre fue un gran lobista de la causa judía. Presidió una nueva organización sionista en América y creía firmemente en la importancia de contar con el apoyo de Estados Unidos. Esto se ha reflejado en la trayectoria de Netanyahu, quien, salvo en su relación con Obama, ha mantenido vínculos cercanos con Clinton, Bush, Trump y, por supuesto, Biden.