Begoña Gómez, la esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sido llamada a declarar, desatando una auténtica vorágine mediática y política. Desde hace unos días, su nombre no deja de resonar en todos los rincones de la campaña electoral, convirtiéndose en el centro de una estrategia que ambos partidos, PSOE y PP, creen que puede proporcionarles una ventaja crucial en las próximas elecciones europeas.

La inesperada citación ha desatado un efecto Begoña, 'todo a la vez en todas partes', evocando la famosa película. Socialistas y populares han encontrado en este asunto una herramienta para ganar votos, una situación que rara vez se presenta: ¿puede un mismo evento beneficiar a dos partidos opuestos en la misma campaña? Sí, se ha convertido en un revulsivo para ambos.

Tanto el PSOE como el PP están utilizando este acontecimiento para movilizar a su electorado, en una dinámica que Orriols denomina "democracia de trincheras". En este escenario, cada bando interpreta la realidad a su favor, utilizando la misma información para activar a sus votantes.

La estrategia del PSOE

Lejos de ver la citación de Begoña Gómez como una amenaza, el PSOE ha decidido darle la vuelta a la situación. En un mitin reciente, la presencia de Gómez buscó minimizar y normalizar el caso, enfrentándolo, por ejemplo, al de la pareja de Isabel Díaz Ayuso.

El partido de Sánchez ha adoptado un mensaje populista, presentando al presidente como víctima de una cacería entre los medios y la judicatura, planteando la dicotomía entre una derecha que intenta intoxicar para derrocar a un gobierno legítimo y ellos, los defensores de la democracia frente a la degradación de las instituciones.

La estrategia del PP

Por su parte, el PP ha visto en la citación una oportunidad dorada. Consideran que el escándalo puede ser el empujón definitivo que necesitan para mantener sus expectativas de cara a las europeas, alejando el foco de las controversias recientes, como su oferta a los de Puigdemont.

El partido ha enfatizado que es la primera vez que se cita a la esposa de un presidente del Gobierno en un posible caso de corrupción, comparando la situación con la de figuras como Donald Trump o los Kirchner, para subrayar la gravedad del asunto.

Un contexto propicio

Estamos a días de las elecciones europeas, y el contexto es ideal para que ambos partidos saquen partido de la situación. La cercanía de los comicios asegura que el tema no se desinfle, y ayuda a combatir el principal obstáculo de estas elecciones: la baja participación.

En una España altamente polarizada, cada voto cuenta, y tanto el PSOE como el PP buscan concentrar y movilizar a sus bases, asegurando que sus votantes no se queden en casa.