Europa se une para rearmarse

Del Eurofighter al FCAS: ejemplos de cooperación militar que marcan el futuro de la seguridad europea

El contexto El Gobierno destinará 3.500 millones extra a Defensa sin pasar por el Parlamento, utilizará una cláusula de los presupuestos de 2021 aún vigente para cumplir con el 2% del PIB exigido por la OTAN.

Del Eurofighter al FCAS: ejemplos de cooperación militar que marcan el futuro de la seguridad europea

El Gobierno inyectará al menos 3.500 millones de euros en el presupuesto de defensa para alcanzar el 2% del PIB exigido por la OTAN, pero lo hará sin necesidad de aprobación parlamentaria. Según 'El País', el Ejecutivo utilizará una disposición excepcional de los presupuestos de 2021 —los diseñados en plena pandemia— que aún sigue vigente. Se trata del artículo 9 de la ley de presupuestos de 2023, actualmente prorrogados, que permite al Ministerio de Hacienda mover partidas dentro de las cuentas públicas siempre que no se supere el techo de gasto.

Este aumento en la inversión en defensa se produce en un momento en el que Europa ha decidido reforzar su capacidad militar de forma coordinada. La guerra en Ucrania y la tensión internacional han acelerado proyectos de cooperación armamentística entre los países de la UE. Y la historia demuestra que cuando el continente ha trabajado unido en defensa, los resultados han sido positivos.

Eurofighter: la respuesta europea en la Guerra Fría

En los años 70, con la Guerra Fría aún en su punto álgido, Alemania, Italia y Reino Unido impulsaron el desarrollo de un caza avanzado que pudiera hacer frente a las amenazas de los países comunistas. España se sumó años después a este ambicioso proyecto, bautizado como Eurofighter Typhoon. Desde entonces, las principales empresas aeroespaciales y de defensa de estos cuatro países han trabajado juntas en su desarrollo y producción.

Hoy, el Eurofighter es uno de los aviones de combate más avanzados del mundo, con capacidad para adaptarse a múltiples roles en combate. Su éxito demuestra que la cooperación europea en defensa puede generar tecnología puntera y garantizar la soberanía militar del continente.

FCAS: el caza del futuro con inteligencia artificial

El Futuro Sistema Aéreo de Combate (FCAS, por sus siglas en inglés) es el gran proyecto con el que Europa busca dominar el cielo en las próximas décadas. Liderado por Francia, Alemania y España, este sistema de nueva generación reemplazará al Eurofighter y al Rafale francés, incorporando inteligencia artificial y conectividad en red.

La clave del FCAS será su capacidad para operar con un "enjambre" de drones y recopilar en tiempo realtoda la información del campo de batalla. Los datos se almacenarán en una nube compartida entre los países participantes, lo que permitirá una toma de decisiones más rápida y efectiva en combate.

Eurodrone: el gran dron europeo para vigilancia e inteligencia

La autonomía en sistemas aéreos no tripulados es otro de los grandes retos de Europa. Para ello, Alemania lidera el Eurodrone, un proyecto en el que participan España, Francia e Italia. Este dron planeador será capaz de operar durante 24 horas seguidas en misiones de vigilancia, reconocimiento e inteligencia.

Si los plazos se cumplen, España recibirá su primer Eurodrone en 2029, reforzando así sus capacidades en operaciones de seguridad. Este programa busca reducir la dependencia de Europa de tecnologías estadounidenses o israelíes en el ámbito de los drones militares.

PESCO: el gran paraguas de la cooperación militar en la UE

Más allá de proyectos concretos, la UE ha impulsado la Cooperación Estructurada Permanente (PESCO), un marco que permite a los Estados miembros desarrollar capacidades de defensa conjuntas.

Actualmente, existen 34 iniciativas dentro de PESCO, y España participa en 16 de ellas, liderando un proyecto centrado en el desarrollo de un sistema de mando y control para operaciones de la Unión Europea.