España busca con Japón comercio de calidad. La Comisión Europea trabaja en una ley que impida la compra compulsiva de productos Chinos de baja calidad. Desde el Ministerio de Consumo aseguran que lo que se busca es evitar que compremos productos de baja calidad, que se estropearán pronto y que, dado su bajo coste, nadie va a reparar, porque es más barato volver a comprarse otro.

Esos productos vienen desde China en avión, contaminan cuando se producen y en su traslado. Por eso, aunque añadir aranceles no provocará un incremento grande en su precio, sí es el primer paso para que dejen de ser tan baratos.

¿Cuánto dinero nos hemos gastado los europeos en artículos de baja calidad en el último año? 2.300 millones de euros en esas compras inferiores a 150 euros. Solo en el mes de abril, se hicieron 350.000 pedidos. Eso significa dos entregas por hogar en un solo mes. En el último año, se han duplicado este tipo de compras. Y la tendencia es a seguir subiendo.

Estos productos de bajo coste, muchas veces, no superan los controles de seguridad impuestos por la Unión Europea, solo los que tienen la etiqueta de que han superado las pruebas de calidad. Ahora, China, ha creado una etiqueta que es casi igual, también tiene una C y una E, pero esta etiqueta no señala que el producto haya superado las pruebas de calidad de Europa, simplemente marca que es un producto exportado por China.