El falso juego político del PP: trató de comparar la responsabilidad de la gestión de la DANA de Mazón con la de Ribera

Este miércoles, las cámaras del Congreso y el Senado se convirtieron en el escenario de intensos enfrentamientos políticos tras la devastadora DANA que afectó gravemente a la Comunitat Valenciana. El Partido Popular (PP) arremetió contra la vicepresidenta Teresa Ribera, acusándola de "apagón informativo" durante el pico de la emergencia. Por su parte, el Gobierno central defendió su actuación, argumentando que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) emitió alertas clave y proporcionó datos en tiempo real.

El PP denunció que la CHJ permaneció "dos horas y media sin comunicar la subida brusca del caudal". Sin embargo, el Ministerio para la Transición Ecológica refutó esta acusación, asegurando que Protección Civil fue informada en dos ocasiones (a las 16:37 y 16:50) sobre lluvias acumuladas en puntos críticos, como el barranco del Poyo. Además, resaltaron que el sistema hidrológico de la CHJ se actualiza cada cinco minutos y está disponible públicamente.

Este enfrentamiento se da en el contexto de negociaciones políticas, aún no cerradas, sobre el futuro de Ribera como nueva vicepresidenta de la Comisión Europea. En este marco, el PP intentó vincular la responsabilidad en la gestión de la DANA entre la vicepresidenta y el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón.

El PP también criticó que el mando de la emergencia no se retirara a Mazón, presidente autonómico de su partido, a pesar de las duras críticas. Miguel Tellado, portavoz del PP, sugirió que "quien estaba sentado en el Cecopi era el Gobierno autonómico, mientras el Gobierno de España estaba muy lejos: Sánchez en la India, Ribera en Bruselas y París, y el secretario de Estado de Medio Ambiente en Colombia". Esta estrategia de reproche político fue adoptada por el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien defendió al presidente autonómico, pese a las críticas, y continuó atacando la gestión de Ribera.

En un intento de desviar la atención de la figura de Mazón, el PP llevó este mensaje a Europa, donde buscó retrasar el nombramiento de Ribera como vicepresidenta de la Comisión Europea. Los populares europeos, que apoyaron las críticas hacia la vicepresidenta, votaron en contra de su designación y sugirieron que podría haber responsabilidades por la tragedia, incluso planteando la posibilidad de una imputación.

Finalmente, Teresa Ribera compareció este miércoles en el Senado por petición propia, aunque bajo presión de la mayoría senatorial. A pesar de su intervención, los populares continúan defendiendo la gestión de Mazón. La situación pone en evidencia las tensiones políticas en torno a la gestión de la catástrofe, con horas de explicaciones de Ribera contrastando con las cinco horas en las que Mazón estuvo ausente, sin que se haya esclarecido su paradero.