En un pacto cargado de incógnitas, el PSOE y Junts sellan un compromiso que abarca desde la amnistía hasta la cesión de impuestos. Sin embargo, las dudas persisten: ¿Qué se ha concretado realmente en este acuerdo?

Amnistía: ¿Sí o no?

En un giro sorprendente, Puigdemont logra la amnistía en el acuerdo. El PSOE acepta borrar el pasado, anulando condenas e investigaciones relacionadas con los eventos del proceso independentista. El detalle de la ley queda pendiente, pero la voluntad de hacer borrón y cuenta nueva es evidente.

'Lawfare' y revisiones judiciales

Contrario a las interpretaciones, el PSOE niega haber aceptado el 'lawfare' según la visión de Junts. Los socialistas rechazan revisar sentencias en busca de persecución política, aclarando mediante notas y comunicados para disipar cualquier malentendido.

¿Y el referéndum?

El ansiado referéndum de autodeterminación no figura en el acuerdo. Entre las aspiraciones independentistas y las concesiones del PSOE, se establece la necesidad de negociar. Los independentistas proponen un referéndum dentro de los límites constitucionales, mientras el PSOE ofrece retomar el Estatuto de 2006.

Cesión de impuestos y empresas

Contrario a la creencia popular, Cataluña no retendrá todo lo recaudado. El PSOE propone medidas para revisar la financiación autonómica y facilitar la vuelta de empresas que abandonaron la región durante el 'procés'. Negociaciones pendientes para determinar cómo se llevarán a cabo.

Verificador internacional

En un gesto de transparencia, se confirma la presencia de un verificador internacional. Similar al acuerdo con Esquerra Republicana, esta figura será un mediador encargado de supervisar el cumplimiento de los acuerdos y actuará como un contrapeso entre dos partes desconfiadas.