Gritando, con una motosierra y fuera de sí: el 'show' de Musk en la cumbre ultraconservadora

Lo que ocurrió en la última cumbre ultraconservadora deja una imagen difícil de olvidar: Elon Musk, en el escenario, fuera de sí, con gafas de sol, gorra, una cadena de oro y saltando como si estuviera en un videoclip de rap. Pero lo peor no fue su 'show': el verdadero clímax llegó cuando Javier Milei, presidente de Argentina, le entregó una motosierra. Lo que vino después es una mezcla de delirio y agresividad.

Musk, gritando frases incoherentes, agitaba la motosierra mientras el público lo ovacionaba. En un momento intentó articular algún mensaje, pero su discurso se volvió aún más preocupante. No es ningún secreto que el magnate ha admitido consumir ketamina bajo prescripción médica para tratar la depresión, una sustancia que él mismo ha defendido públicamente. Pero el estado en el que se encontraba en esa tarima ha encendido todas las alarmas.

Insultos y amenazas: Musk desata su ira

Su comportamiento no se limitó al escenario. En una entrevista, Musk afirmó que astronautas han sido "abandonados en el espacio por razones políticas", una declaración completamente falsa. Un astronauta lo corrigió, negando esa versión, y la reacción de Musk fue una furia desmedida: "Eres completamente retrasado mental", le espetó, rematando con un insulto directo: "Estúpido".

No es un caso aislado. Según el 'Wall Street Journal', los abogados de Musk están presionando a los anunciantes de 'X' con una advertencia: o aumentan su gasto en publicidad o Musk usará su influencia con Trump para perjudicar sus negocios. Es decir, una extorsión en toda regla.

Y este es el hombre que, con su poder, su dinero y su inestabilidad, influye directamente en el futuro de la tecnología, el espacio y la política mundial.