¿La clave? El efectivo

Koldo García y los 24.000 euros en su casa: ¿"Costumbre familiar" o corrupción?

Bajo la lupa No hay pruebas de que los 24.000 euros encontrados en la vivienda de Koldo García sean dinero negro, pero el efectivo es común en casos de corrupción en España, como se vio en el caso Malaya o los ERE.

"En metálico", un clásico de la corrupción

Este martes, Koldo García ha tenido que responder ante el Tribunal Supremo una cuestión que, aunque no constituye un delito en sí misma, levanta sospechas en un país marcado por grandes casos de corrupción: ¿por qué guardaba 24.000 euros en efectivo en su casa? La respuesta de Koldo ha sido: "Es costumbre en mi familia", ha declarado, para luego añadir a laSexta a la salida, "como todos los españoles".

Sin embargo, ¿es cierto que todos los españoles guardan dinero en casa? No del todo. Según un estudio del Banco de España, ocho de cada diez españoles admiten que conservan dinero en efectivo en sus hogares, ya sea como un sistema de ahorro alternativo al banco o para cubrir gastos cotidianos e imprevistos. Este hábito no es ilegal siempre y cuando se pueda acreditar el origen lícito del dinero, pero quienes optan por este método deben asumir riesgos: robos, incendios o cualquier otra contingencia que podría hacerlo desaparece.

El efectivo, la clave de los grandes casos de corrupción

En el caso de Koldo García, de momento no hay evidencia de que los 24.000 euros que se encontraron en su vivienda sean dinero negro. Sin embargo, en España el efectivo suele ser un sospechoso habitual en casos de corrupción, tal y como lo demuestran décadas de escándalos. De las bolsas de basura llenas de billetes del caso Malaya al maletero repleto de dinero de Jordi Pujol Ferrusola o los 82.000 euros junto a la cama del conseguidor de los ERE, el patrón se repite.

Uno de los ejemplos más sonados fue el audio que precipitó la caída de Alfonso Grau, presidente de la Diputación de Valencia, contando "hasta dos millones de pelas" obtenidos de contratos irregulares mientras estaba en un coche con el conocido 'yonki del dinero'.

El denominador común en estos casos no solo es la presencia de dinero en metálico, sino también los billetes de 500 euros. Por ejemplo, el extesorero del PP confesó que los sobresueldos a miembros del partido se entregaban en sobres con billetes de esta denominación.

Según los datos, hasta el 90% de estos billetes han estado vinculados a actividades ilegales. Su retiro de circulación en 2019 buscaba limitar el blanqueo de capitales, pero en España aún circulan más de nueve millones de unidades. Para limitar el blanqueo de capitales, Hacienda ha prohibido los pagos en efectivo que superen los 1.000 euros.

Además de las cantidades y los tipos de billetes, hay algo más sospechoso en los casos de corrupción: los lugares donde se esconde el efectivo. Recientemente, un jefe policial fue descubierto con 20 millones de euros en su casa y otro millón escondido en su despacho. El efectivo estaba oculto al vacío, en dobles fondos de paredes y hasta en el interior de una piscina.

Por su parte, Francisco Granados admitió haber guardado un millón de euros en casa de sus suegros, dentro de un maletín con doble candado y, según él, sin que ellos supieran cómo llegó ahí.

Aunque guardar dinero en casa no es ilegal, las sospechas surgen cuando las sumas son considerables. En un país marcado por décadas de corrupción, cada billete en efectivo parece llevar consigo una historia que merece ser contada. Koldo García tendrá que demostrar que, en su caso, el dinero no es más que "una costumbre familiar", y no el eco de prácticas cuestionables del pasado.