¿Con o sin intención?
Mariah Carey se salva del plagio de 'All I Want for Christmas Is You': otros músicos que no tuvieron el mismo final
Las consecuencias Aunque Mariah Carey se libra, otros artistas han pagado un alto precio, enfrentando demandas millonarias, pérdidas de regalías y cambios en los créditos de sus canciones tras ser condenados por plagio.

Tras una larga batalla judicial, Mariah Carey ha salido triunfante en el juicio por plagio de su icónico villancico 'All I Want for Christmas Is You'. La artista fue acusada de haber copiado elementos de una canción country del mismo nombre, pero la jueza a cargo del caso determinó que la similitud entre ambas composiciones no era suficiente para constituir una violación de los derechos de autor.
Como resultado, Carey evita el pago de 20 millones de dólares y su himno navideño seguirá sonando sin restricciones cada diciembre, para alegría de unos y desesperación de otros.
Pero no todos los artistas han corrido con la misma suerte. A lo largo de la historia de la música, han existido numerosos casos de litigios por plagio, algunos claros y descarados, otros producto de coincidencias o de inspiraciones involuntarias que han terminado en los tribunales.
Uno de los casos más emblemáticos de plagio involucra a Chuck Berry y los Beach Boys. La legendaria banda californiana lanzó 'Surfin' USA', cuya melodía es casi una copia exacta de 'Sweet Little Sixteen' de Berry.
Brian Wilson reconoció la inspiración, y tras una disputa legal, el padre de Wilson, que administraba los derechos de la banda, incluyó a Berry en los créditos para asegurarse de que recibiera su parte de las regalías.
'Los Beatles' tampoco escaparon a este tipo de controversias. John Lennon admitió que Come Together tomó prestados elementos de 'You Can't Catch Me', una canción de Berry. Aunque John Lennon argumentó que se trataba de una reinterpretación más que de una copia, la discográfica de Berry lo demandó y finalmente se llegó a un acuerdo extrajudicial.
Michael Jackson, Rihanna y un estribillo
Otro caso relevante involucra a Michael Jackson y su tema 'Wanna Be Startin' Somethin'', en el que se puede escuchar un estribillo claramente inspirado en 'Soul Makossa', una canción del músico camerunés Manu Dibango. Al darse cuenta del uso no autorizado, Dibango demandó a Jackson, quien resolvió el conflicto, pagándole 200.000 dólares en los años 80 (equivalentes a unos 650.000 euros actuales).
Sin embargo, la historia no terminó ahí. Años después, Rihanna utilizó el mismo fragmento en 'Don't Stop the Music' y Dibango volvió a reclamar. Sin embargo, como ya había aceptado su inclusión en los créditos de la canción, un tribunal determinó que no podía exigir más compensaciones.
El caso de 'Bitter Sweet Symphony', años de injusticia
Pocos casos han sido tan desalentadores como el de 'Bitter Sweet Symphony' de The Verve. La banda británica utilizó una versión orquestal de 'The Last Time' de The Rolling Stones, obteniendo permiso para samplear la melodía. Sin embargo, los administradores de los derechos de los Stones argumentaron que The Verve había excedido lo acordado y presentaron una demanda.
El fallo judicial otorgó todos los derechos de autor de la canción a los Rolling Stones, lo que significó que The Verve no percibiera ingresos por su mayor éxito durante 22 años. Finalmente, en 2019, Mick Jagger y Keith Richards decidieron devolverles la autoría de la canción, aunque sin ninguna compensación económica por los años de regalías perdidas.
Rod Stewart y el plagio "inconsciente"
Otro caso peculiar es el de Rod Stewart con su éxito 'Do You Think I'm Sexy?'. A finales de los 70, Stewart viajó a Brasil, donde escuchó una melodía pegadiza que, sin darse cuenta, terminó incorporando en su canción.
Cuando el compositor brasileño descubrió el parecido, demandó a Stewart, quien admitió el "plagio inconsciente". Para resolver el conflicto, llegaron a un acuerdo: todas las ganancias obtenidas hasta ese momento se destinarían a UNICEF, y el músico brasileño se quedaría con los derechos futuros de la canción.