Seguro que ya están al tanto de la operación histórica de capital de Telefónica. La compañía Saudi Telecom Company (STC Group) se ha convertido en el mayor accionista de la operadora española, con el 9,9% de sus acciones. La operación se ha cerrado por una suma de 2.100 millones de euros. Pero lo que seguro no saben es quién está detrás de esta empresa. Su accionista mayoritario es el fondo soberano saudí, que cuenta con el 64% del capital. Y está presidido por Mohamed bin Salman, el príncipe heredero saudí.
¿Pero quién es exactamente? Mohamed bin Salman es de facto el gobernador de Arabia Saudí, debido a la enfermedad que padece su padre. A pesar de que había varios herederos al trono, el rey Salman bin Abdulaziz le escogió a él por delante de sus otros dos hijos. Del príncipe heredero siempre se ha dicho que es un reformista o mejor dicho: un modernizador. Desde su llegada al poder en 2017, su principal meta ha sido tener más poder y limpiar la imagen de Arabia Saudí. En un país muy cuestionado por no respetar los derechos humanos, sus primeras medidas fueron: permitir a las mujeres conducir, asistir a eventos deportivos o acudir las salas de cine.
Una muestra que dejó al descubierto esa tendencia reformista del príncipe heredero saudí fue su viaje a Estados Unidos en 2017. Mohamed bin Salman se reunió en Silicon Valley con el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg. En esa ocasión pudimos verle vistiendo unos vaqueros y una americana, dejando a un lado las formalidades.
Hasta ahora la relación era clara Arabia y Petróleo. Por eso, en su idea por lavar la imagen del país está el 'Plan Vision 2030'. Un proyecto con el que el país árabe espera dejar atrás la enorme dependencia del petróleo con inversiones en renovables y en turismo. Y al igual que otros países árabes, desde Arabia Saudí entienden que una buena manera de lavar la imagen es gracias al entretenimiento. En los últimos años Arabia Saudí ha logrado lo nunca visto. O más bien, el dinero ha conseguido lo nunca visto. Primero, compró en 2021 el club inglés Newcastle United por un valor de 365 millones de euros. Y ahora algunas de las grandes figuras del mundo del futbol, como Cristiano Ronaldo, Karim Benzema o Neymar, han abandonado Europa para recalar en la liga árabe. Pero no solo son los futbolistas los que recalan en el país árabe. Arabia Saudí también ha conseguido que algunas de las competiciones deportivas más importantes del mundo se disputen allí, como la Supercopa de España, el Golf o la Formula 1. El entretenimiento en una sociedad donde dos tercios tienen menos de 35 años está siendo clave para convertirse en una válvula de escape y eso Mohamed bin Salman lo sabe.
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Entre sus propiedades se encuentra este el cuadro más caro de la historia: 'El Salvatore Mundi'. Es una pintura de Cristo atribuida a Leonardo da Vinci, que data en torno al año 1500 y está valorado en 389 millones de euros. Pero su imagen no va unido solo al poder y al dinero. Bin Salman también ha sido relacionado con el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi. Según la CIA, el príncipe heredero habría ordenado en 2018 a varios agentes de su gobierno asesinarle en la embajada saudí de Estambul.