Un paso necesario
Nuevos delitos digitales: lo que será ilegal con la nueva ley de protección al menor
¿Por qué es importante? El uso masivo de redes entre menores aumenta los riesgos de ciberacoso, manipulación de imágenes y trastornos psicológicos. La nueva ley implementa medidas de protección más estrictas.
El uso de Internet entre los adolescentes españoles es prácticamente universal. Nueve de cada diez se conectan a diario y casi todos son usuarios activos de redes sociales. La más popular entre los menores de 18 años es TikTok, donde uno de cada cinco pasa más de dos horas al día, y más de la mitad, al menos una hora. Pero este consumo masivo no es inocuo: cada vez más estudios lo relacionan con problemas de baja autoestima, ansiedad y, en los casos más graves, pensamientos suicidas.
Sin embargo, los riesgos no se limitan a la salud mental. En los últimos años, han surgido nuevas formas de acoso y delitos digitales que ni siquiera existían hace una década. Desde el ciberacoso y el 'grooming' hasta la difusión de imágenes sexuales falsas generadas con inteligencia artificial, los menores están expuestos a peligros que la legislación actual no contempla.
Para combatir esta situación, el Gobierno ha aprobado un proyecto de ley de protección al menor en Internet, que introduce nuevas figuras delictivas y refuerza la seguridad digital en los más jóvenes.
Nuevos delitos: lo que la ley penalizará por primera vez
Uno de los puntos clave de la reforma es la criminalización de la difusión de contenido sexual falso generado con inteligencia artificial. Hasta ahora, no existía un marco legal claro para castigar la creación y distribución de este tipo de material. Con la nueva ley, tanto la manipulación de imágenes como la creación de audios falsos de contenido sexual serán delitos, castigados con penas que aún deben determinarse.
Otro de los delitos que se endurecerán es el 'grooming', una práctica en la que adultos se hacen pasar por menores en redes sociales para ganarse la confianza de niños y adolescentes con fines sexuales. Aunque ya estaba tipificado en el Código Penal, la nueva ley busca ampliar su alcance y endurecer las penas.
El ciberacoso, que afecta a casi el 40% de los menores en algún momento de su infancia, también tendrá un nuevo mecanismo de protección: las órdenes de alejamiento virtual. Los tribunales podrán prohibir a los agresores contactar con sus víctimas a través de cualquier red social, una medida inédita en España.
Por otro lado, la ley atacará un problema que preocupa a padres y educadores: la exposición temprana a la pornografía. Actualmente, la edad media del primer contacto con este contenido se ha adelantado hasta los ocho años, gracias al acceso sin restricciones a través de Internet. Con la nueva regulación, se convertirá en delito facilitar material pornográfico a menores.
Control parental obligatorio y educación digital
La ley no solo endurece las penas, sino que también incorpora medidas de prevención para reducir el impacto de la exposición digital en los menores. Uno de los cambios más importantes es la implantación obligatoria del control parental en todos los dispositivos electrónicos. Los fabricantes estarán obligados a incluir de fábrica sistemas de restricción para evitar que los menores accedan a contenido inapropiado.
Además, la edad mínima de consentimiento para registrarse en redes sociales se elevará de los 14 a los 16 años, con el objetivo de retrasar el acceso a entornos digitales que pueden ser perjudiciales para su desarrollo.
En el ámbito educativo, se reforzará la formación sobre seguridad en Internet en los colegios. También se implementarán test pediátricos para detectar precozmente adicciones digitales o situaciones de riesgo en menores, permitiendo una intervención temprana.