La matriz de Silicon Valley Bank se ha declarado en bancarrota. El banco de las 'start ups' ha tenido que ser rescatado y ahora empiezan las investigaciones de qué ha ocurrido para que haya terminado así. El Departamento de Justicia de Estados Unidos y el regulador del mercado de dicho país ya han detectado prácticas sospechosas en su actividad, según publica 'The Wall Street Journal'.
Primera sospecha
El presidente y otros directivos vendieron sus acciones del banco días antes del colapso. El CEO, Greg Becker, ganó así tres millones y medio de euros. Tanto él como sus directivos se defienden diciendo que esa venta estaba programada desde hacía un mes. Sin embargo, el Presidente de Silicon Valley llevaba ya dos años vendiendo todas sus acciones de su empresa. En total, se ha embolsado hasta 30 millones de euros.
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Segunda sospecha
Los empleados del Silicon Valley Bank recibieron también sus bonus antes de que el Gobierno tomara el control del banco. Esos bonus fueron de hasta 140.000 dólares (más de 131.000 euros). Algunos de esos empleados han dicho que siempre reciben los bonus del año anterior "el segundo viernes de marzo". Y ¿cuándo era ese segundo viernes de marzo? Justo el día que el Gobierno de Estados Unidos tomó el control del banco.
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