En 1812, un ciudadano pagó 40 reales por un décimo de la Lotería que le dio un premio de 64.000. El sorteo se inventó para pagar los gastos militares de la guerra con los franceses. Desde entonces, el frenesí por la Loteria se implantó en España.
¿Qué opciones hay de que nos toque el primer premio de la Lotería de Navidad? Pues la realidad es que todos los números del sorteo tienen la misma probabilidad: una entre 100.000. A pesar de la incertidumbre, el frenesí persiste entre los trabajadores y el público en general.
Comparando con décadas pasadas, el premio 'Gordo', ahora de 400.000 euros, ha perdido relativa magnitud. En 1973, daba 7,5 millones de pesetas, el 15% del premio, mientras hoy, los premios apenas cubren el coste de un buen piso. Hacienda también hace su parte, quedándose con un porcentaje considerable.
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Más allá de la estadística y el valor del premio, las motivaciones para comprar lotería son diversas: necesidad, costumbre, presión social y hasta 'envidia preventiva'. En esta temporada festiva, la Lotería de Navidad se mantiene como una tradición arraigada, donde el factor suerte y la ilusión siguen siendo protagonistas.
Los datos muestran otra realidad
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La consellera de Turismo, aseguró que "algo bueno del cambio climático es la extensión de la temporada turística". Sin embargo, la última DANA y sus daños y pérdidas, ponen en duda si realmente compensa este 'lado positivo'.