Política de apaciguamiento
Repartirse el mundo "en nombre de la paz": Trump repite el error de Chamberlain con Ucrania y Putin
El contexto Hace 80 años, Chamberlain cedió Checoslovaquia a Hitler para evitar la guerra; hoy, Trump sugiere concesiones a Putin para apaciguar su expansión en Ucrania.

Donald Trump ha asegurado que su principal objetivo es poner fin al conflicto en Ucrania "en nombre de la paz". "Estamos intentando conseguir la paz con Rusia y Ucrania y estamos trabajando muy duro para lograrlo", afirmó el presidente, añadiendo que sus esfuerzos "contribuirán a asegurar la paz". Pero las palabras suenan inquietantemente familiares: repartirse el mundo en nombre de la paz no es algo nuevo.
Hace 80 años, el primer ministro británico Neville Chamberlain proclamó su deseo de alcanzar la paz a toda costa, entregando Checoslovaquia a Hitler para apaciguar su expansión en Europa. La famosa "política de apaciguamiento", que en su día no frenó las ansias de conquista de los nazis, deja una sombra sobre las declaraciones de Trump.
Mientras la historia no se repite, al menos rima, y las voces críticas alertan sobre los peligros de esta estrategia. Según Arancha González Laya, exministra de Exteriores de España, ofrecer una parte de Ucrania a Rusia sin consultar al país en cuestión "es casi invitar a otros a seguir esa vía". La preocupación es clara: un paso en falso en Ucrania podría alentar el expansionismo de otras potencias, desde China con Taiwán hasta incluso Estados Unidos con Canadá.
El paralelismo no se limita a la política exterior. El legado de Trump también incluye su famoso enfrentamiento con Europa en 2018, cuando amenazó con imponer aranceles del 25% al aluminio y al acero europeos. La respuesta de la Unión Europea fue la creación de una 'lista de detorsión', como las Harley-Davidson, Levi's y el bourbon de Kentucky, destinados a hacer que Trump reconsiderara su postura.
Ignacio García Bercero, uno de los negociadores clave de la Unión Europea en ese entonces, recordará este viernes en laSexta Columna cómo Europa logró hacerse respetar frente a las amenazas comerciales del entonces presidente estadounidense. Sin duda, un episodio que resuena con fuerza hoy en día.