En Más Vale Tarde, la psicóloga Ana Isabel Gutiérrez ha analizado las profundas secuelas que dejan catástrofes como la DANA. La presentadora, Cristina Pardo, ha destacado lo emocionantes que son las imágenes de rescate, donde personas asumen riesgos extremos para ayudar a otros, y ha preguntado a Gutiérrez sobre cómo estas experiencias pueden influir en la vida normal de los afectados.

Gutiérrez ha explicado que las reacciones tras un evento traumático varían significativamente. "Hay dos tipos de reacciones: una es la de las personas que presentan nerviosismo o crisis de pánico, y otra la de quienes mantienen la calma y se involucran en conductas prosociales, buscando ayudar a los demás", ha comentado. Sin embargo, ha advertido que la respuesta inicial no siempre es indicativa de cómo se desarrollará la salud mental a largo plazo.

"Es crucial considerar qué pasará después del evento. Alrededor del 20% de las personas que permanecen calmadas pueden experimentar menos síntomas, mientras que el 70% restante puede enfrentar traumas significativos, lo que puede llevar al desarrollo de trastorno de estrés postraumático (TEPT), que puede manifestarse meses después", ha indicado Gutiérrez.

Al abordar la manifestación de este estrés, Gutiérrez ha detallado que puede aparecer de forma demorada, con síntomas como pesadillas, reacciones de hiperalerta, miedo a la lluvia o a los ruidos fuertes, y síntomas físicos como taquicardia y sudoración. "Es vital que estas personas sean atendidas por especialistas. El estrés postraumático tiene tratamiento, pero es fundamental actuar antes de que se cronifique", ha concluido la psicóloga, subrayando la creciente conciencia sobre la importancia de la salud mental, especialmente tras la pandemia.