El periodista Luis Calero se enfunda el mandil para convertirse en alumno por un día y conocer desde dentro la formación en hostelería, uno de los sectores más importantes de la economía española, que el año pasado generó 1,7 millones de puestos de trabajo.

Así, de la mano de Edu, uno de los alumnos, aprende a elaborar la receta clásica de un café vienés, coctelera y soplete en mano: "Lo que más me gusta de la hostelería para mí es la coctelería, yo sé qué esta es mi vocación", asegura el estudiante.

Nacho, por su parte, le enseña a desespinar una lubina a la sal. En su caso, afirma que ha descubierto que le gusta más estar en sala y el trato con los clientes que la cocina. "Siento que es lo mío", afirma. "Es importante que haya formación porque, aunque parezca que no, en este campo también se necesita", apunta.

Ellos son dos de los alumnos que aprenden Dirección de Servicios de la mano de la Fundación Mahou San Miguel. Una formación que les permitirá convertirse en maîtres, jefes de rango, sumilleres, cocteleros o barman en el futuro.

"Les damos la oportunidad de formarse en este sector, trabajamos en red con las mejores escuelas de hostelería", explica la directora de la Fundación, Virginia Luca de Tena, que señala que "después estos jóvenes hacen prácticas en clientes y les dan esa oportunidad de entrada en el mercado laboral".