La joven de 21 años que ha denunciado por agresión sexual al futbolista Rafa Mir ha asegurado que el jugador le encerró en el baño con pestillo y le penetró. Según publica El Mundo, que ha tenido acceso al atestado, Mir le mete en el baño y en ese lugar se produce la agresión sexual agravada.

El jugador la sentó encima de un lavabo y "procedió a introducirle los dedos en la vagina sin quitarle la falda pantalón" mientras ella le suplicaba que "la dejara irse porque venía su padre a recogerla", según publica El Mundo.

La otra denunciante, una joven de 25 años, se centra en el episodio que vivió en la piscina, en este caso con el también jugador de fútbol e íntimo amigo de Mir, Pablo Jara.

Según cuenta la víctima, este se pone grosero y empieza a tocarle a la joven por todo el cuerpo. La situación empieza a ser tan desagradable que ella decide salir de la piscina.

Su amiga de 21 años, que también está en la piscina, sale tras ella y es entonces cuando supuestamente Jara empieza a insultarlas y le propina un puñetazo a la joven de 25 años.

Minutos más tarde llega una patrulla de la Guardia Civil porque un vecino había llamado tras escuchar el escándalo. En ese momento aún no se hablaba de agresión sexual. Pero en el trayecto del coche, es cuando ambas amigas hablan y se cuentan lo que ha pasado. Ahí se activa el protocolo.