La defensa de Daniel Sancho ha presentado un informe ante el Tribunal de Tailandia para demostrar que el asesinato de Edwin Arrieta no fue premeditado, sino que el español fue improvisando después de que el colombiano falleciera a causa de un fuerte golpe que se dio durante la pelea que ambos mantuvieron en el bungalow de Koh Pha Ngan.
Lo hacen cuando está a punto de concluir el plazo que les otorgó la Corte de Koh Samui, que les dio hasta el próximo 25 de julio para que la defensa y la acusación presentaran sus escritos de conclusión junto a los informes que avalan sus tesis sobre el caso; ya que la sentencia se hará pública el próximo 29 de agosto.
Este informe que ha aportado la defensa del español, y a la que ha tenido acceso El Periódico de España, lo han elaborado dos criminólogos Carmen Balfagón y Ramón Chippirrás. En él analizan el comportamiento de Daniel Sancho antes y después del asesinato de Edwin Arrieta.
En el escrito recogen algunas de las imágenes que ya había tomado la Policía de Tailandia, como por ejemplo, una camiseta negra en la que se puede ver que no hay ningún rastro de sangre. Con esto lo que quieren demostrar es que Daniel Sancho no dio ninguna puñalada a Arrieta.
También presentan las fotos de unas bolsas de basura que, según su defensa, demostrarían que no estaba premeditado porque los ejemplares son diferentes. Con esto pretenden evidenciar que no las compró todas iguales en el mismo momento y que tuvo que improvisar con lo que encontraba.
Además, presentan la foto del pasaporte de Daniel Sancho, el que dejó en la tienda donde alquiló la moto. Los criminólogos explican que, "si el señor Daniel hubiera planeado algo (en alusión a matar a Edwin Arrieta), nunca habría dejado su pasaporte en depósito".