El líder de Junts, Carles Puigdemont, ha vuelto a ser el centro de la polémica política en España tras evitar su detención este jueves en Barcelona, donde hizo una aparición pública sorpresiva luego de siete años huido de la Justicia. En un giro inesperado, Puigdemont dio un discurso desde un escenario ante simpatizantes, en medio de un amplio dispositivo policial de los Mossos d'Esquadra, antes de desaparecer nuevamente.

El fracaso de su detención ha causado indignación y críticas tanto en partidos políticos como en sindicatos policiales, que se preguntan cómo pudo escapar bajo la vigilancia de la policía autonómica. Mientras el Ministerio del Interior y la Moncloa guardan silencio, las sospechas sobre un posible acuerdo previo entre algunos mossos y Puigdemont para permitirle dar el discurso y entregarse después han cobrado fuerza, especialmente después de que el líder independentista rompiera, supuestamente, dicho pacto al huir del lugar.

En el programa Más Vale Tarde, Elisa Beni comentó sobre la situación, sugiriendo que la falta de acción por parte del Gobierno podría estar motivada por la dependencia política del Ejecutivo en los votos de Junts para mantener su estabilidad parlamentaria. "No puede haber otra explicación", señaló Beni, "porque el Gobierno, políticamente, no quería ser el responsable de la detención de Puigdemont, que es su socio, por otra parte, y el que le sostiene". La periodista también apuntó a la posible influencia que Junts y Puigdemont siguen teniendo dentro de los Mossos d'Esquadra, planteando serias dudas sobre la actuación de la policía autonómica en este incidente.