En la noche del sábado, la Policía Local de Sevilla procedió al desalojo de una fiesta de Halloween sin alcohol o 'light' por motivos de seguridad. En total, 13 menores tuvieron que ser atendidos por desvanecimientos, crisis de ansiedad y deshidratación.

En Más Vale Tarde, hemos hablado con Yolanda Rodríguez, madre de una de las asistentes a esa fiesta, que tuvo claro desde el primer momento que en el recinto había "mucha gente". "Me dijo: 'No puedo respirar, hay muchísima gente'. Intentó echarse agua, refrescarse... Le dije que intentase ir a la salida para respirar, pero ahí empezó a entrar la Policía", relata.

Yolanda afirma que las amigas de su hija salieron de la fiesta "con ataques de ansiedad, llorando, muy nerviosas, con compañeras que se desmayaban y vomitaban". "Fue un auténtico caos", resume. Eso sí, celebra que no pasase nada más grave.

Para ella, hubo dos factores clave en que esa fiesta no acabase en tragedia: la actuación de los agentes de seguridad y la "frialdad" de los jóvenes.