Se lo contaron las víctimas

Al menos dos profesoras del colegio en La Moraleja sabían de la presunta agresión sexual de un cura a cinco niñas de 6 años

Los detalles Según cuenta el atestado policial, las docentes, que ni denunciaron los hechos ni hablaron con el sacerdote, dijeron a las niñas que no pasaba nada. El sacerdote, ante la justicia, ha negado cualquier comportamiento inapropiado con las menores.

Dos profesoras sabían de la presunta agresión sexual de un cura a cinco alumnas de un colegio
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Al menos dos profesoras del colegio Highlans El Encinar de La Moraleja, tal y como cuenta el atestado policial sabían de la supuesta agresión sexual del cura Marcelino a cinco niñas de 6 años del centro.

Según recoge dicho documento, las propias víctimas contaron a las docentes que el sacerdote las realizaba tocamientos, a lo que ellas respondieron que no pasaba nada. Que no podían tocar sus zonas íntimas y que no se podían quedar a solas.

Las profesoras, a pesar de que conocían los hechos, no lo denunciaron. Tampoco acudieron a hablar con el sacerdote, según ha afirmado él mismo durante el juicio: "En ningún momento".

La Policía ha dado comienzo a la investigación

La Policía ya ha comenzado la investigación en el centro, en una escuela de élite en la que ya se han inspeccionado las estancias en las que, según cuentan los testimonios, se producían los tocamientos durante los recreos.

Además, se han solicitado al mencionado centro las grabaciones de las cámaras de seguridad, para comprobar si efectivamente el religioso se quedaba con las menores a solas.

En las denuncias, las menores reconocen conversaciones con docentes del centro que, según cuentan, en ningún momento se pusieron en contacto con los padres y las madres. Los familiares, por su parte, relatan que en las niñas se produjeron cambios de comportamiento, pesadillas, retraimiento y nerviosismo desde hace tiempo.

El cura, "perplejo", culpa a su pasado de la acusación

El cura Marcelino, en sus palabras ante la justicia tras las acusaciones de las niñas, se ha mostrado "perplejo" y sorprendido, y ha negado además cualquier tipo de comportamiento inadecuado con las menores.

En ese sentido, el religioso culpa a su pasado de la acusación, haciendo referencia a su currículum como mano derecha de Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo incriminado por pederasta. Algunos padres, por este motivo, ya habían protestado por su llegada al colegio en 2021, e incluso habían prohibido a sus hijas acercarse a él.