En Náquera, una localidad de Valencia, la procesión del Corpus Cristi, que se detiene en varios altares, hizo una de las paradas en uno situado en la puerta de la sede local de Vox. La decisión fue del alcalde, del partido de extrema derecha, con el apoyo de varios concejales del PP.

Al ver la imagen, Iñaki López comenta en el vídeo sobre estas líneas que "la miramos a sepia y parece que estamos en 1936". Algunos de los vecinos que han querido hablar, explica la reportera Emma Tomàs, aseguran que el pasado domingo se mezcló un acto religioso con lo político.