Los Campings proliferaron en los años 60, pero hoy en día poco tiene que ver con el concepto de aquella época porque ahora en los campings se puede estar como en un auténtico resort.
Bungalows de 70 metros cuadrados, completamente equipados y con alguna que otra sorpresa. Sara Estévez, directora del Camping "Canto de la Gallina" dice que "el lujo se puede ver en los muebles de diseño especialmente realizados para el campng".
Tal ha sido su éxito que ya les han bautizado como los "Glamping", una combinación de campo y glamour, lo que deja bastante claro de que se trata esta nueva tendencia.
"Un Glamping tiene que destacar por ofrecer elementos que los distingan del resto", explica Sara Estévez, directora del Camping 'El Canto de la Gallina', en Madrid.
El 'Glamping' existe desde hace varios años, pero no se empezó a hacer popular hasta que algunos personajes conocidos se decantaron por esta modalidad para su luna de miel.
Algo que sorprendió hasta que se vieron por primera vez que las típicas acampadas, no lo eran tanto. Música, cena a luz de las velas, camas que poco tienen que ver con un saco de dormir. Son alojamientos pensados para los campistas más sibaritas que no quieren renunciar al confort de un hotel.
Los clientes más habituales, familias o parejas, dispuestas a dejarse más dinero que un campista tradicional en el viaje. "Para mí es un camping de lujo, tenemos todas las comodidades que queremos y los niños están encantados, tiene otro tipo de libertad y nosotros fenomenal", explicaba un cliente del camping.
