Con la celebración del Medusa Fest en Cullera (Valencia), Más Vale Tarde ha comprobado los protocolos de seguridad contra la sumisión química que se implementan en este tipo de eventos.

Uno de los aspectos más destacables son los análisis de sustancias en las bebidas que se han realizado en los denominados 'puntos violeta', a los que cualquier persona que sospeche que hay droga en su copa puede acudir para que le tomen una pequeña muestra y dirimir si hay alguna sustancia ilegal.

El abogado Juan Manuel Medina ha explicado en Más Vale Tarde las consecuencias legales que podría tener que afrontar una persona si vierte sustancias estupefacientes en la bebida de alguien.

"Si te pillan drogando a alguien es un delito contra la salud pública. El simple hecho de ofrecer o facilitar sustancias es delito. Y si encima es con la finalidad de cometer otro delito como es una agresión sexual estaríamos hablando de un delito de lesiones contra otra persona", explica el abogado.

Sin embargo, el principal problema es conseguir demostrar que se ha producido la sumisión química e identificar al autor. "Que pillen a alguien drogando a otra persona en estos eventos es complicado", sostiene Juan Manuel Medina.