Unos padres de Barcelona se han encontrado en su portal un cartel en el que uno de sus vecinos les recrimina que su bebé no para de llorar. "Estamos muy molestos con los lloros del bebé. Llevamos más de medio año aguantando sin tregua los lloros. Lleva un tiempo que grita a pulmón. No creemos normal que un bebé esté por la noche 15-20 minutos llorando de seguido", dice el texto.
Para Ramón Espina, analista político, el comportamiento de los vecinos es una "actitud de mierda de la individualidad absoluta para conducirse en la vida". Es más, insiste en que los padres no tienen la culpa. La abogada Beatriz de Vicente asegura que, en esa situación, habla comunicación y mediación.
"El enfoque no es coger a unos padres, que son los primeros que deben estar destrozados. Si no duerme el vecino, imagínate lo que duermen el papá y la mamá. Vete a la mierda, hombre", estalla Espinar al opinar sobre la situación.