La variante Delta preocupa a la sociedad española en su conjunto. Ya supone el 4% del total de casos diagnosticados en España y se hace preciso prestar atención a sus particularidades. Te explicamos cómo se contagia, cuáles son sus síntomas y los países más afectados por su transmisibilidad.

Transmisibilidad, efectividad y severidad

La variante Delta tiene un mayor efecto de transmisibilidad que el resto. Los primeros estudios elaborados en Reino Unido cifran entre un en 60% y un 90% más de capacidad de transmisión que otras.

Esta mutación cuenta, a su vez, con una leve disminución de la efectividad vacunal. Esto hace referencia a la primera dosis; con las dos no hay que temer potenciales efectos. Sin embargo, cuando se tiene solo una, sí que es más probable que afecte a los ciudadanos.

Por ello, tal y como asegura la periodista Sara Ramos, los países que se han visto mayoritariamente afectados por esta variante han acelerado los procesos para concentrar las dos dosis en un menor periodo de tiempo.

El Ministerio de Sanidad aún no otorga datos claros sobre su severidad. Además, los países que más cuentan con afección de esta mutación han agilizado la inmunización y, por ello, es complicado definir su impacto. Sin embargo, Sanidad apunta a ello como una posibilidad.

Síntomas

Los síntomas más comunes de esta variante son más parecidos a los de un resfriado que a los del propio coronavirus: dolor de cabeza, de garganta y mucosidad –esta última, inédita hasta ahora-, da menos tos y, sobre todo, no hace perder el olfato.

Hasta ahora, la pérdida de olfato era "el síntoma clave" que ponía en alerta para dudar sobre si se tenía o no el virus. Por ello, las autoridades sanitarias recomiendan que si se presenta alguno de estos síntomas, se acuda al centro más cercano para realizarse una prueba.

¿Dónde está?

La mutación Delta se encuentra fundamentalmente en Reino Unido: allí representa una tasa del 84,7% con respecto a los positivos totales registrados. Rusia y Portugal también se ven muy afectadas, con porcentajes de incidencia de 80,7% y 76,6%, respectivamente. Estos datos han sido aportados por el Consorcio Internacional de Genoma, órgano que apunta a que en España el porcentaje se reduce hasta un 9,7% -el Ministerio rebaja la cifra hasta un 4%-.

Suecia, Francia y Dinamarca son las que más han esquivado. En total, del conjunto de pruebas positivas de estos países, solo un 1,4%, 1,3% y 0,4% pertenecen a la variante india, respectivamente.

¿Y cómo se aplaca?

En España, varias comunidades autónomas han acortado los plazos de vacunación para evitar frenar su impacto. Es el caso de Madrid, que redujo de 12 a 11 semanas la vacunación con AstraZeneca en personas de entre 60 y 69 años para aplacar la incidencia de la variante india. También han seguido el ejemplo Andalucía y Galicia.