La localidad de Mira, en Cuenca, ha sido gravemente afectada por la DANA. La crecida del agua alcanzó los tres metros de altura, provocando inundaciones devastadoras en viviendas y calles. Equipos de emergencia siguen trabajando para achicar el agua, mientras los vecinos intentan salvar lo poco que queda de sus hogares.

Una de las vecinas, atrapada en su casa desde ayer, relató los momentos de angustia: "El agua subía por la escalera; no podíamos salir", comentó. "Estamos sin luz, sin agua potable, sin nada. Intentamos sacar todo, pero el interior de la casa está en estado deplorable", añadió otra vecina, mientras mostraba más paredes manchadas de lodo y los muebles arruinados por el barro acumulado.

El equipo de Más Vale Tarde, que logró acceder a la zona, describió el escenario como "dantesco". En una vivienda, el agua había subido por las escaleras hasta cubrir casi un cuadro colgado en la pared. La persona que residía en el segundo piso -la misma de la que hablábamos anteriormente-, una persona mayor, quedó atrapada sin poder bajar al primer piso por el nivel del agua.

La situación en las calles también es crítica. Una de las vecinas explicó que, aunque sacan agua y barro constantemente, parece no haber fin: "Cuanto más sacamos, más queda". En una de las calles más afectadas, los reporteros se toparon con un vehículo atascado en medio de la calle, bloqueando el paso y actuando como un tapón que retenía aún más agua.

Los habitantes de Mira, Cuenca, ahora enfrentan un largo proceso de recuperación mientras intentan reconstruir sus vidas entre el barro, el lodo y los daños materiales.