Alberto Chicote está haciendo una profunda labor de investigación para saber cuáles son las causas por las que el Nicasso no acaba de funcionar. Para cumplir con esta tarea, necesita conocer la opinión del personal del restaurante sobre este asunto. Gabriela, una de las camareras, es completamente sincera con el chef.

"Yo a Chicote le voy a decir la verdad, porque no me voy a callar nada. Él tiene que saberlo todo para poder así tener una solución", advertía ella previamente en su entrevista personal ante la cámara. Y así es. El problema, según ella, son las cucarachas. "Tenemos muchísimas. No podemos dejar nada fuera. Nada, nada, nada, nada", insiste.

Al chef se le indigesta la comida. Sobre la mesa, se encuentra una tortilla que se disponía a probar y ahora no tiene tan claro que vaya a hacerlo. "La tortilla estaba fuera", le recuerda a Gabriela. Ella lo niega e intenta que se tranquilice. Ellos han estado allí en todo momento y no había insectos. "¿Habéis estado con una escopeta?", bromea Chicote. Pero la broma resulta no serlo tanto. "A veces las matamos con un soplete".

La cara de Alberto es para enmarcar. Nunca había oído algo así. El local, reconoce la joven, nunca ha sido limpiado a fondo. Los cables sueltos y la suciedad terminan por completar el pack. "Gabriela le ha contado todo lo que yo no quería que le contara. Mira que le dije 'estas cosas no se cuentan'", lamenta Manel.