José Antonio, dueño de 'El sitio', desaparece en pleno servicio, cuando Raquel, la camarera, está desbordada y la cocina es un auténtico un caos. Los platos salen tarde y fríos y la repentina plaga de cucarachas deja sin palabras a Chicote.
Sin dar con la solución, José Antonio reaparece en la sala y decide sacar el cajón flamenco y comenzar a tocar ante los comensales para "amenizar el servicio". "¿Qué hace?", pregunta Chicote al resto de compañeras en cocina. "¡A tomar por el culo!", exclama al chef al ver al dueño tocando el instrumento mientras cantan y a los comensales dan palmas.
Más Noticias
- Dani Mateo, a Álvaro Pombo tras decir que Cervantes "era un pringado que no ganó premios": "A Nadal nunca le dieron el Nadal"
- El alcalde de Aldaia, ante la nueva DANA: "Después de lo que pasó tenemos una incertidumbre terrible"
- Guillermo Fesser analiza el encuentro entre Trump y Biden: "Los dos se odian, eso es evidente"
- La 'señora bien' y su enfado con Cáritas Burgos: "Una cosa es que nos preocupe la España vaciada y otra que la llenemos de moritos"
- Gabriel Rufián reflexiona sobre el silencio de Ayuso en los últimos días: "Busca ser presidenta de su partido y de este país"
"Mi paciencia tiene un límite", afirma Eli, la copropietaria, a las cámaras de Pesadilla, tras ver cómo su marido "pasa olímpicamente" de ayudar en el servicio. Completamente cabreada sale de la cocina y golpea el cajón flamenco con una patada, terminándolo por lanzar con sus propias manos a la calle, ante perpleja mirada del resto de los comensales. José Antonio, absolutamente disgustado, rompe a llorar tras ver lo que ha hecho su mujer: "No puedo hablar".
Del bar del Club Deportivo Estoril
Chicote regala a una clienta del CD Estoril una empanadilla al no llegar su comida: "Por lo menos se entretiene"
Una clienta del Estoril II se queja de que sus dos acompañantes han comido mientras que a ella todavía no le ha llegado su hamburguesa. Al oírla, Alberto Chicote se levanta y le ofrece su empanadilla.