Alberto Chicote convoca al equipo de 'Tradiciones Peruanas' al completo en un teatro tras el desastroso servicio que han vivido. Un equipo que Jorge señala como los únicos culpables de todos los males del restaurante. El chef quiere que los empleados den a Jorge su opinión sobre cómo está llevando el negocio y si es cierto lo que él cree.

Tras escuchar a Patricia, Diego y Joseph, llega el turno de Lis, su esposa y copropietaria del restaurante, que asegura no sentirse parte de un equipo. "Jorge, en los 16 años que tenemos juntos, no ha hecho nada. No me ha valorado a mí, ni a mi hijo", cuenta Lis, que reconoce que su hijo duda que este restaurante sea la ilusión de su padre.

"Lo tengo claro, no soy buen ejemplo ni para mi hijo ni para nadie", reconoce hundido entre lágrimas el dueño de 'Tradiciones Peruanas', que asegura a Chicote que está dispuesto a hacer lo que sea necesario para cambiar esta situación por todos. El propietario reconoce estar muy arrepentido por la forma en la que ha tratado a su equipo, pero con ganas de dar la vuelta a la situación.