El servicio de 'El legado de Andrés' ha sido caótico y termina con balance de Chicote, lágrimas de Ana y un ataque de Estefanía a los camareros del restaurante.
Alberto Chicote hace balance del desastroso servicio de 'El legado de Andrés'. Un servicio por el que Ana siente vergüenza. "No me extraña, la siento yo y no es mío", le dice el chef antes de marcharse del restaurante para seguir trabajando.
La mujer se derrumba. "Ya está, ya habrá días mejores. Él está aquí para eso", le consuela su hija Estefanía. "Ahora le vas a demostrar tú a él que tú puedes cambiar y vas a demostrar que tú eres la jefa", le dice a su madre.
Sin embargo la jefa de sala no sabe cómo hacerlo con una plantilla en la que va cada uno " a su puta bola". "Porque tú quieres porque les has dado demasiada confianza y se han reído en tu puta cara", responde la joven de manera directa a Ana. Un comentario que pone las pilas a la dueña del restaurante: "¡Hasta aquí hemos llegado!".
Otros momentos destacados
Durante el primer servicio, la actitud de Ana, la dueña de 'El legado de Andrés' y jefa de sala, desespera a los camareros y a Alberto Chicote.
Ana se derrumba al ver cómo sus meteduras de pata terminan con el abandono de los comensales. Sin embargo, su hija saca las uñas por su madre delante de todo el restaurante.
A pesar de la ayuda de Alberto Chicote en El legado de Andrés, Ana está perdida en la sala y Andrés en la cocina. Los clientes acaban devolviendo tantos platos que no hay género suficiente para seguir con el servicio y Chicote tiene que comunicar a los clientes que no pueden atenderles.
El equipo al completo asiste a la revelación de la nueva imagen de El legado de Andrés, la emoción de los dueños es evidente al descubrir el local totalmente transformado.
A pesar del entusiasmo por hacer un buen trabajo en la reapertura, Andrés sigue perdido con las comandas en la cocina y Chicote "se pone tan nervioso" que termina zarandeando al cocinero para hacerle reaccionar.
Alberto Chicote alucina
La risa del dueño del CD Estoril ante el enfado de los clientes: "Me da miedo salir, me iba a ir y casi me linchan"
"¿Qué es lo divertido?", pregunta alucinado Alberto Chicote a Álex, dueño del Estoril, que entra en la cocina riéndose por el enfado de sus clientes: "Tienes a la gente fuera sin comer ni beber y cagandose en la puta...".