Tres días después de que diese comienzo la catástrofe del Prestige, todos los tripulantes que quedaban en el petrolero fueron evacuados ante el riesgo de que se partiese en dos, algo que acabó ocurriendo. En la noche del viernes 15 de noviembre, el capitán del buque, Apostolos Mangouras, fue detenido por negarse a colaborar en los primeros momentos del desastre.

En el vídeo, recordamos cómo fueron esos momentos. Para el periodista Gonzalo Cortizo, todo formó parte de un movimiento para "ponerse pronto a buscar a un culpable". "Forma parte de esos actos poco piadosos de algunos Gobiernos que sacuden sus responsabilidades y atribuirlas al eslabón débil de la cadena", asegura por su parte Juan Zamora, capitán y doctor en Marina Civil.

José Luis López Sors, director general de la Marina Mercante en 2002, confiesa que "quería ver la cara de Mangouras" cuando fue detenido. "Me dio pena, pero no deja de sentimiento", zanja.