Ricardo Gabaldón es el alcalde, del Partido Popular, de Utiel. Y tomó una decisión, junto con su equipo, que salvó vidas en la localidad. Cuando el aviso de la AEMET todavía era naranja, su equipo tomó la decisión a las siete de la mañana de suspender todas las actividades educativas.

"El nivel de alerta en ese momento era naranja, no era rojo, luego en seguida cambió a rojo, pero quizás cuando cambió a rojo posiblemente podía estar ya el instituto con trabajo, con alumnos, con profesores y aquí vienen de fuera también con lo cual empiezan a las 8 de la mañana y la decisión había que tomarla a las 7", afirma.

Y la realidad es que salvó vidas. Por ejemplo, el instituto Alameda de Utiel es hoy un perfecto escenario apocalíptico de muros reventados por la fuerza del agua donde los angustiantes pasillos cubiertos de lodo nos dan una muestra de la trampa mortal que podrían haber sido sus aulas si el Ayuntamiento hubiera actuado.

"Sin duda el haber suspendido eso, yo creo que es posiblemente la mejor decisión que hemos adoptado y vayamos a adoptar en los cuatro años de legislatura. La gente nos lo está agradeciendo, quizá en un primer momento, no se entendió, pero la gente ahora cuando vamos por la calle, pese a que están muy fastidiados, han perdido todo, pese a esa situación nos lo agradecen", explica.