Según la Organización Mundial de la Salud, las personas que sobrevivieron a la intoxicación por el aceite de colza adulterado tienen más de 100 secuelas. Miguel Ángel Sánchez, víctima, explica que "la afectación neurológica es de lo más importante" y enumera las diferentes enfermedades que padece, como muestra.
"El veneno, en los primeros años, me perforó el tabique nasal. Una vez, el otorrino me preguntó si había consumido cocaína, pero le dije que no, que no podía beber siquiera una cerveza porque mi hígado no me lo permite", recuerda.
Además, Miguel Ángel sigue sin saber si el siguiente síntoma puede ser el definitivo. "Lo malo de esta enfermedad es que 40 años después tienes síntomas nuevos", lamenta. Él, como tantos otros sigue luchando y, a través de su relato, en laSexta Columna recordamos la crisis alimentaria más grave de la historia de España.
"Es una enfermedad que se enmarca en los cánones de enfermedad rara, pero solo se produjo en España en 1981 y de forma epidémica", sostiene Manuel Posada, doctor del Instituto de Investigación de Enfermedades Raras.
La historia de Miguel Ángel Sánchez es el relato de una vida truncada por la intoxicación,una vida con muchos sueños incumplidos, como jugar con si hijo. Así lo cuenta él y lo recoge el vídeo que se incluye a continuación.
Entrevista en laSexta Columna
Un catedrático explica en qué consistía el plan de 2006 para el barranco del Poyo: "Habría reducido los daños económicos al 50%"
laSexta Columna entrevista en este vídeo a Félix Francés, catedrático en Ingeniería Hidráulica de la Universitat Politécnica de Valencia, que en 2006 participó en un plan para paliar las inundaciones en el barranco del Poyo.