Un mensaje en clave
Una no tan inocente paella: los mensajes ocultos de Bárbara Rey después de que el CESID allanara su casa
Tras el asalto a su casa, la vedette envió mensajes que solo ahora sabemos descifrar: imágenes, aparentemente inocentes, cocinando ante las cámaras. Hoy sabemos que aquella paella escondía un significado mucho mayor.
En pleno chantaje de Bárbara Rey a Juan Carlos I, los espías del CESID habrían entrado en el hogar de la vedette donde supuestamente se guardaban los vídeos comprometidos del monarca. Tras ese asalto a su casa, la artista, enfadada, parece enviar mensajes ocultos, que solo ahora, sabiendo lo que hoy sabemos, podemos interpretar.
Imágenes aparentemente inocentes, grabadas en casa de la vedette tan solo tres días después del asalto, en las que ella preparaba una paella. Un plato que entonces significaba poco, pero que años después adquiere otro sentido, porque ahora sabemos que parte del material del chantaje era precisamente fotos amorosas en torno a una sabrosa paella. "Que os aproveche", decía ella ante la cámara.
Un arroz aparentemente inocente que ahora suena a mensajito. Es a partir de ese instante cuando los acontecimientos se precipitan: dos semanas después de cocinar esa paella ante las cámaras, Bárbara Rey denuncia el robo en su domicilio de documentación personal que "implica a personas importantes de este país".