A pocos metros del salón donde se iba a oficializar la abdicación del rey Juan Carlos I en junio 2014, el monarca emérito empezó a abdicar en la ceremonia de la Pascua Militar seis meses antes (el 8 de enero de 2014). Ahí dio un discurso que lo cambia todo, porque su núcleo cercano empezó a preparar sigilosamente su abdicación.

Mabel Gález, periodista de El País y autora de 'Letizia real', cuenta que en su intervención en la Pascua Militar Juan Carlos I "se pierde, no sabe llevar el hilo y se le ve confundido".

En la misma línea, el periodista y autor de 'King Corp', David Fernández, señala que el emérito "resopla e, incluso, hace un buf" como diciendo "no sé lo que estoy leyendo".

"Con el paso del tiempo, supe que venía de Londres y que no había dormido", relata Gálaz, y añade que había ido a celebrar su cumpleaños con su amante Corinna y no había descansado. "Había pasado una noche de farra. Había bebido y había dormido poco", destaca David Fernández.

Sin embargo, él aseguró en su momento que era porque "la iluminación era mala y la letra (del discurso) era pequeña". Lo cierto es que fueron cinco minutos y 56 segundos que impactan a todos los presentes y que aceleran el final de casi cuatro décadas de reinado.