Comenzamos la búsqueda para alquilar un piso en Madrid, y encontramos un estudio de 28 metros cuadrados por 1.090 euros al mes, y con "lista de espera", según nos dicen. Lo intentamos entonces en Barcelona, donde encontramos una habitación que se alquila como piso por el "módico" precio de 1.155 euros al mes. Y atención, porque se trata de 12 metros cuadrados.
Lo volvemos a intentar en Madrid, y encontramos este "ofertón": un piso de 20 metros cuadrados, que antes costaba 2.069 euros al mes, y que ha bajado a 1.880. Llamamos, y comprobamos que la oferta tiene truco: y es que hay que alquilarlo para un año. Además, encontramos que no se permite visitar el piso antes de alquilarlo.