Isabel Forner explica en Zapeando que nunca "se ha montado en Blablacar", pero no por iniciativa propia, sino porque su madre se lo tiene prohibido. Sin embargo, tiene claro que si en alguna ocasión lo hace, la experiencia no sería muy agradable para ella.

"El que conduce pone heavy metal y a mí no me gusta", empieza diciendo la zapeadora. Asimismo, asegura que en todo momento "manda el del coche, tú pagas, pero no mandas". A su vez, Forner, que lo más aseguro es que durante el viaje su posible conductor ponga la calefacción, algo que a ella la marea.

Sin embargo, lo que no soporta Forner de su hipotético viaje es que el conductor decida "dónde parar" durante el viaje. Un factor muy importante porque a ella le gusta elegir dónde comer cuando viaja por carretera.