María Martínez
Editorial: Crossbooks
Año de publicación original: 2024
¿Crees en las casualidades o en que todo pasa por algo? La magia de las casualidades imposibles se mete de lleno en este tema con una historia que te va a hacer pensar y, probablemente, sentir más de lo que esperas. Esta novela tiene como protagonistas a dos personajes que, desde el principio, parecen destinados a encontrarse, pero en circunstancias que ninguno de los dos esperaba.
Por un lado, tenemos a Céline, una chica que ha pasado su vida encerrada en una burbuja debido a una enfermedad. Su día a día siempre ha sido más limitado que el de los demás, hasta que, por fin, tiene la oportunidad de empezar de nuevo. Esta segunda oportunidad suena increíble, ¿verdad? Pues más o menos. Porque aunque Céline siente que por fin tiene las puertas abiertas al mundo, eso también la expone a cosas como el desengaño, el miedo y las decisiones que le darán más de un dolor de cabeza.
Esta novela tiene como protagonistas a dos personajes que, desde el principio, parecen destinados a encontrarse
Del otro lado está Julien, un chico que parece estar en la cuerda floja. Vive en París, la ciudad del amor y las luces, pero para él todo es ruido y caos. Un gran drama ha torcido su vida hasta el punto de no encontrarle sentido. No aguanta más el constante sentimiento de que su existencia se está cayendo a pedazos. Vamos, que lo ves y te dan ganas de darle un abrazo y decirle que todo va a estar bien (aunque ni él lo cree).
Y luego está ese "tropiezo" que une a los dos, o tal vez los separe, dependiendo de cómo se mire. Aquí es donde entra el gran tema de la novela: ¿de verdad todo pasa por algo? ¿O a veces son solo coincidencias, casualidades, cosas que podrían haber sido diferentes? Perdonad si soy críptico pero no os voy a destrozar el gran giro de la novela.
Una enfermedad, una traición y lo inesperado
La historia es mucho más que un simple romance. Sí, hay una conexión especial entre Céline y Julien, pero María Martínez no nos da el típico "chico conoce a chica, se enamoran y viven felices". No. Aquí hay capas de profundidad emocional. Ambos personajes tienen heridas del pasado, inseguridades, y la sensación de que, por más que lo intenten, la vida sigue jugándoles malas pasadas.
María Martínez no nos da el típico "chico conoce a chica, se enamoran y viven felices". No. Aquí hay capas de profundidad emocional
Céline es un personaje con el que te encariñas rápido. Imagínate pasar toda tu vida atrapada por algo que está fuera de tu control. Sus miedos y dudas son completamente comprensibles, pero también es admirable ver cómo intenta tomar las riendas de su futuro, incluso cuando las cosas no salen como ella pensaba.
Mientras, Julien es el personaje que parece más perdido, buscando respuestas que quizás ni siquiera existen. Su lucha es más interna, lidiando con la presión de una vida que se siente vacía y sin rumbo. Y con un sentimiento de culpa que no se puede quitar. En muchos momentos, parece estar esperando algo, pero ni siquiera él sabe qué. Y ahí es donde entra Céline.
Calorcito en el corazón
Lo que hace interesante la historia es la química entre los protagonistas, la forma en que ambos se complementan, pero no de esa manera cliché de "eres mi media naranja". Más bien, se encuentran en medio de sus propias tormentas, y de alguna manera, se ayudan a buscar una nueva dirección, o al menos a intentarlo.
Los personajes son reales, plagados de defectos. Y eso es refrescante. Las historias donde el destino juega un papel suelen ser complicadas, porque es fácil caer en lo exagerado o lo cursi. Aquí, aunque hay una dosis de magia en la idea de que "nada es casualidad", todo se maneja de manera sutil.
Lo mejor de esta novela es la química entre los personajes. Céline y Julien no tienen una relación fácil ni predecible, pero es precisamente por eso que sus interacciones te enganchan
Eso sí, al principio puede que el ritmo sea un poco lento, ya que la autora se toma su tiempo para que conozcamos bien a los personajes. También peca un poquito de pomposidad a la hora de cerrar cada capítulo. Todo es tremendo. Todo es más grande que la vida. Pero al final da igual. El objetivo está cumplido más que de sobra porque una vez que entras en la trama, es difícil soltar el libro. Y cuando llega el momento del gran giro, no vais a hacer otra cosa hasta terminar la última página. Palabra.
La magia de las casualidades imposibles es una novela que tiene mucho corazón. Es una exploración sobre el destino, el amor, y las decisiones que nos llevan por caminos inesperados. Al final, lo que importa no es solo el destino, sino lo que haces con las oportunidades que se te presentan.
Un fenómeno de 500.000 lectoras
Llegados a este punto es importante mencionar a la autora, María Martínez, que es una auténtica referente en el género del romance contemporáneo y juvenil. Con más de 500.000 lectoras que siguen cada una de sus novelas, se ha ganado un lugar entre las escritoras más leídas en español.
Martínez ha sabido conectar con su público al contar historias que, aunque hablan de amor, también profundizan en temas como la búsqueda personal, las segundas oportunidades y los giros inesperados de la vida. Si ya has leído algunos de sus libros anteriores, como La nieve que susurra al caer o Cuando no queden más estrellas que contar sabrás que su estilo es cercano, auténtico, y siempre consigue emocionar.